

Frenos
Los frenos son uno de los sistemas de seguridad más importantes del vehículo y, por ello, es necesario prestarles una especial atención.
Un sistema de frenado en mal estado aumenta la distancia necesaria para detener el vehículo.
Muchas veces, al frenar, se oye un ruido extraño, eso puede deberse a unas pastillas de freno gastadas, unos frenos de mala calidad o unos discos de freno con deformaciones y en mal estado.
Podemos notar que nuestro vehículo frena menos de lo habitual, esto puede deberse al desgaste de las pastillas y/o discos de freno. Si notas que el tacto del pedal de freno va más duro de lo normal, lo más habitual sea que necesites sustituir el líquido de frenos.
Este líquido absorbe humedad, por lo tanto, al aumentar la cantidad de agua, pierde prestación y afecta directamente al frenado.
Se recomienda la sustitución del líquido de frenos cada 2 años para garantizar su estado óptimo.
Si notas el pedal más duro de lo habitual también puede que se deba a que las pastillas de freno se han cristalizado. Normalmente, también percibiremos un ruido cuando ocurra esto. Esto pasa cuando las pastillas se calientas en exceso.
En resumen, debemos revisar todos los componentes del sistema de frenado periódicamente para garantizar nuestra seguridad durante la conducción.






